Sacando brillo a 2016

Recorro las tendencias de lo que podría ser un brillante 2016. Una conjunción de lo anunciado, lo posible y lo probable. Para no desilusionar a nadie.

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MÚSICA. El año va a empezar fuerte. En menos de una semana seguro que estamos celebrando lo nuevo de David Bowie, que con sus dos singles en pleno rendimiento (Black Star y Lazarus) ha dejado patente que, con todo su background, puede seguir haciendo cosas que no suenan a nada anterior, extrañezas como de otro planeta. El futurismo de las vanguardias del siglo XX se hace realidad hoy gracias a Bowie. Fangoria también revolucionará las pistas de baile con una nueva colección de canciones que van a sonar más disco que nunca; la catarsis electrónica como antídoto para los dramas, el desamor y el dolor. Uno de los temas, avanzado hace unas semanas por el reality Alaska y Mario, se titula «Fiesta en el Infierno». En otros derroteros, se rumorea que sacarán disco los Savages, Donkeyboy, Santigold, Poliça, Metronomy, Pet Shop Boys, Röyksopp y The XX. Esperaremos en pie todas esas novedades.

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Los chicos peculiares que nos traerá Tim Burton.

CINE. Las taquillas de masas se llenarán con la atracción más secreta de Almodóvar. Su Silencio, que finalmente se llamará Julieta porque Martin Scorsese está rodando Silence, que también se estrenará este año. En otra dimensión, de ciencia ficción, se espera la secuela de la espectacular Prometheus de Ridley Scott, que enlazaría esta saga con la de Alien. También llegará la enésima aventura de X-Men: Apocalipsis. La que espero con más ganas es la nueva de Alejandro G. Iñárritu, que en pocas semanas dejará caer otro Birdman, The Revenant, con DiCaprio como protagonistaEn el terreno de la animación, las segundas partes habituales de Pixar traerán Buscando a Dory, con ese doblaje español tan amable de Anabel Alonso. Por su lado, Tim Burton reproducirá un nuevo cuento: El Hogar de Miss Peregrine para Chicos Peculiares, con el que vuelve a la oscuridad; la historia de un orfanato en una isla abandonada donde habitan seres raritos.

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Kanye West quiere que vistamos todo el rato en nude.

TENDENCIAS. Recemos para que el 16 sea el año de enterrar algunas modas absurdas que la civilización impuso: los palo-selfies, las meriendas con cupcake, los pantalones arremangados, las zapatillas de cualquier marca imitando las Roshe Run o las compras compulsivas en Primark como modelo perfecto de consumo. *** Pero sobre todo, confío en que sea el fin de la burbuja de la estética Mr. Wonderful, esas tipografías, texturas y materiales que han arruinado la modernidad con la que imaginábamos el siglo XXI. Ahora todo es cuqui y neovintage, mañana debería ser metálico, oscuro, neón y flúor. *** A nivel de moda, Pantone ya definió los colores de la serenidad que nos deslumbrará: el rosa pálido y el azul celeste tirando a pálido también. Todo pálido. *** En cuanto a tejidos, cambiaremos el tono neutro gris por el nude (o eso pretende Kayne West con su última colección). Desaparecerá el blockcolor de estos últimos años bajo los efectos de los lunares, de todos los tamaños y colores. Y el dorado cobrará un nuevo valor. Un 2016 bien lolailo.

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Vida.

VIDA. En mi última visita a Alicante descubrí un concepto revolucionario: el tardeo. Consiste en quedar para beber y tapear a las 7 de la tarde y obviar la salida nocturna. Creo que es la mejor forma de que cale en España (incluida Catalunya) la europeización horaria laboral, la necesaria conciliación familiar, las cenas, teatros y conciertos a horas reales, el primetime televisivo a las 9 pm. Los españoles (y los catalanes los primeros) somos capaces de cualquier cosa si nos hacen ofertas en nuestras barras favoritas. *** Por otra parte, también se comenta que desde que Manuela Carmena hizo unas declaraciones sobre su presunta relación de pareja abierta, 2016 puede ser el año en el que casi todas las parejas se abran. Y poco a poco nos quedaremos Forever Alone, que es un término que ya comentaremos de cara a 2017, cuando esté más cerca el fin del mundo. Porque de esa cumbre del cambio climático a la que asistieron todos los líderes del mundo, incluido Rajoy, yo no me fiaré mucho.